Esta pregunta está siendo repetitiva en los últimos tiempos en las reuniones de marketing tanto en las grandes marcas como en las no tan grandes y es muy comprensible. En el siglo pasado y en parte de este, cuando las marcas hacían sus estrategias de marketing tradicional ponían como centro de dicha estrategia a la imagen de la misma, es decir, como ellos querían que sus clientes o posibles clientes los vieran o percibieran. Eso funcionó y aún funciona el problema empieza cuando esta misma estrategia se quiere replicar en los emergentes espacios digitales y se encuentran con estas 2 trabas. Los “terroristas” (consumidores de 16 a 45 años) armados con un Smartphone y seguidores o a su vez con la competencia que ha puesto sus ojos y parte de su presupuesto en una estrategia digital que tiene como centro “al usuario” (como el usuario los quiere ver) y no la imagen (como ellos se quieren ver) ahí es cuando empiezan los problemas.
Cómo a la competencia la ven en todos lados (Facebook, Instagram, Twitter, Google, Aplicaciones Móviles) y hasta aparecen con retargeting en las páginas web que visitan, los directivos de la marca exclaman pidiendo explicaciones ya sea por la falta de efectividad de campañas en redes o diciendo tal vez «¿Quién carajo es @ChicoPilas que tiene 45 RT, quejándose por nuestro servicio y nos ha convertido en tendencia de mal servicio?»
Esa pequeña o mediana empresa de la competencia o ese “terrorista de imagen digital «que se queja en sus redes con más influencia, no se han dado cuenta que aprendieron las nuevas capacidades, habilidades, y comportamientos de los activos digitales a su disposición hoy , y sobre todo, que un medio de comunicación nuevo necesita nuevas formas de plantear estrategias así como nuevas formas de implementarlas.
No queremos decir que los medios tradicionales han muerto, de ninguna manera, ni nada que se les parezca. Pues lo medios digitales son complementarios aún, lo que decimos es que las formas de plantear estrategias de marketing integral deberían hoy de tratar con más respeto y relevancia a los medios digitales tanto por parte de las agencias como por parte de las marcas por una sencilla razón, y esta es que ¡Los usuarios si lo hacen!
Las empresas deberían preocuparse no solo por hacer una linda campaña sino por ser también eficientes en los objetivos digitales, pues si no lo hacen corren el riesgo de que la competencia sí lo haga y ocupe en su mayoría el mercado digital que están dejando escapar por las malas prácticas.
Los presupuestos digitales en el mundo están creciendo porque las campañas digitales enfocadas en resultados cada vez son más y más eficientes, elevando los indicen de rentabilidad.
Entonces… ¿Que te parece más importante la imagen o los resultados? @javiermurillo68